Semilla en la tierra...

Bueno, pues nuevo relato... este va con música incluída, así que intentad que vaya música y letra... =)

Os pongo el video antes para que sea todo más fácil ;) Espero que os guste.

Suenan una dulce música de guitarra y saxo…no sé a quién se le ocurrió descubrirme las canciones de este hombre, tan llenas de sensualidad y deseo…

“Duele, la vida como un puñal hay veces que duele…”

Me he levantado porque necesitaba observar todo desde fuera. Y te he dejado en la cama, desnuda, con la espalda mirando al techo y tu nuca revuelta de besos…

“…y nada tiene que ver con tu boca

que hecha para besar hay veces que muerde…”

Una noche llena de ti y llena de mí. Las dos, dejando el alma en cada movimiento, dejando el corazón en cada beso, dejando el ansia de tenernos…

“…y nada tiene que ver con el aire

que mueve tu ropa en noches de luna escueta…”

Mordiendo el aire que respiras. Mordiendo tu labio que se me aparecía en frente con un color rojo más intenso que de costumbre…

“…tiembla por los latidos que tú provocas…”

Y sin decir apenas palabras y con los corazones al unísono cierro la puerta que nos une con el mundo. Te quiero para mí sola, te quiero querer, te quiero arrancar la ropa que hace que tu piel esté escondida del mundo…

“…y también porque el querer es temblar a veces…”

Y desnuda frente a mí no he podido más que temblar, temblar de placer, temblar de excitación, temblar de vida…

“…Y yo aquí sigo en mi trinchera, corazón

tirando piedras, contra la última frontera…”

Y sin necesidad de ninguna palabra, tan sólo con mirar tus labios y luego mirar tus ojos encendidos de saliva, la misma saliva que segundos después dejarás entre mis dientes, sobre mis labios y rompiendo la frontera de mis labios lucharás a muerte con mi lengua…

“…y nada tiene que ver con la muerte

Y cuando llegue ese instante

déjame verte…”

Y la delicadeza deja paso a la pasión, no puedo dejar de tocarte, tu cintura, tu vientre, tu espalda, tus pechos…mis manos se mueven por todo tu cuerpo, mis manos quieren leerte, verte…sentirte…hasta llegar al lugar en el que sé que morirás rendida a mí…

“…que no hay mayor libertad

que tenerte enfrente…”

Y con todo sonrío porque he conseguido lo que siempre he deseado, lo que más ansiaba…porque…

...no hay mayor libertad de tenerte en frente…